Dark Souls 3 ya está entre nosotros y ansiado momento de comenzar su aventura ha llegado al fin. Sin duda es uno de los candidatos al GOTY del año, cosa que se ha ganado a pulso gracias a la gran saga que carga en la espalda. Dark Souls se hizo famoso en gran parte por su exigente dificultad, y esta nueva entregan no es una excepción.
Muchos son los nuevos jugadores que trataron de jugar a los dos primeros títulos de la saga tras hacerse conocida, pero su dura curva de dificultad provocó que muchos de estos desistiesen en el intento. Bien es cierto que Dark Souls 3 sigue siendo un desafío, pero las zonas iniciales se han vuelto mucho más accesibles para que tanto los nuevos jugadores se adapten a la saga, como para que los viejos nos hagamos a las nuevas mecánicas de combate.
Ahora bien, en Dark Souls siempre hay una clase inicial que nos hace las cosas más sencillas, y aquí no iba a ser una excepción. En esta ocasión hay mucho donde elegir, pero sin duda el que hace que el comienzo sea más sencillo es el piromántico. Gracias a la nueva mecánica de la concentración y los frascos de ceniza, la cantidad de piromancias que podremos hacer es muy elevada, permitiéndonos eliminar a los enemigos más molestos desde la lejanía y sin ponernos en excesivo peligro.
Con un nivel ocho inicial el piromántico comienza con catorces puntos por igual en fe e inteligencia, sus ramas más desarrolladas. También tendremos doce puntos en fuerza, cosa que nos permitirá hacer mucho daño con su hacha inicial, aunque por el contrario tendremos poca vida, con solo ocho puntos iniciales. Sin duda es una build muy buena para comenzar, pues tendremos mucho daño gracias a nuestras piromancias y la posibilidad de aprender tanto hechizos y milagros desde el principio.
Por último os recomiendo que sí utilizáis esta clase llevéis una combinación de dos frascos de estus y dos frascos de ceniza, ya que necesitaréis recargar la concentración si o si para seguir utilizando las piromancias. Además de esto, debéis tener mucho cuidado porque al tener tan poca vida os mataran en muy pocos golpes, y cuando digo pocos son dos o tres, así que andaros con ojo.