Mi pasión por los juegos de trial no viene de ahora. Recuerdo esos viejos tiempos en los que jugaba a Moto Racer 3 en mi PC e intentaba pasarme esas fases complicadas con mi teclado, lo de carretera se me daba bien pero las fases de este estilo eran bastante complicadas y ahora mismo no recuerdo si llegué a terminar el juego.
Lo que si llegué a terminar han sido las tres entregas de Trial Xtreme. Empecé con la primera porque Samsung la regaló en su tienda de Apps y más tarde probé la segunda (en su versión gratuita, un poco corta) hasta que hace poco me pasé a la tercera versión. Estaría bien mencionar que el juego no es del todo gratis (podrás jugar unas cuantas fases y, cuando las termines, tendrás que pagar si quieres seguir experimentando nuevos niveles).
Yo creo que no pierdes nada probándolo y, si te enganchas, al menos pagarás por un juego que te ha gustado y no por un título que no sabes si te satisfará o no. ¿Por qué me parece tan divertido? Su mecánica es singular pero el control es bueno, es decir, no es de esos juegos como Trials que puede parecer imposible de dominar, a base de un poco de práctica lograrás hacer con tu moto cualquier cosa y, cuando llegues a la última fase, podrás volver a pasar el juego y te darás cuenta de lo que has mejorado.
Además de eso, sus gráficos son realmente buenos por lo que necesitarás un móvil de gama baja-media para que te funcione fluido aunque a día de hoy casi todo el mundo tiene un smartphone con un mínimo de potencia pero antes era normal ver como muchos de los móviles no resistían determinados juegos, si partimos de que el Moto G es el móvil que puede con todo, a partir de ahí irás sobrado de potencia. Si quieres ver un análisis del juego en Andro4all lo han hecho estupendamente.
Google Play – Trial Xtreme 3