Yu-Gi-Oh! surge de la mente de Kazuki Takahashi en forma de manga (publicado desde 1996 en el semanal Shonen Jump). No tardaron en llegar las adaptaciones televisivas y los juegos de cartas intercambiables basados en su universo. Los videojuegos, cómo no, también han recibido adaptaciones de sus historias; la última en aterrizar para los jugadores de PC ha sido este Yu-Gi-Oh! Duel Links, versión digital del ya mencionado juego de cartas que inició su andadura, de la mano de Konami, en dispositivos móviles iOS y Android.
Su adaptación a PC mantiene una clara vocación por el PvP online, pero no olvida un modo campaña que se adapta mejor a ciertos nichos de su ecosistema de jugadores. Se mantiene, como sucedía con su homónimo para móviles, la descarga gratuita (está disponible en Steam) y los packs de cartas de pago.
Yu-Gi-Oh! recibe un rediseño de los controles y de la interfaz para adaptarse a su versión PC. Son más intuitivos y permiten reaccionar mejor a la información que vemos en pantalla. Además, determinados monstruos (como el “Mago Oscuro” o el “Dragón Blanco”) cuentan con efectos visuales dinámicos, que aportan un extra de espectacularidad a los combates.
En la campaña de un jugador se nos introduce en el Mundo de Duelos, donde podremos ponernos en la piel de los personajes más famosos del anime (el universo se construye sobre la segunda adaptación que recibió la serie en el 2000) para completar misiones en las que obtener recompensas, una muy buena forma de ir completando nuestra baraja sin tener que pasar por caja.
Tendremos que enfrentarnos a duelistas legendarios como Yugi, Kaiba, Joey y Mai. Estos duelos no solo nos servirán para poner a prueba nuestras habilidades, sino que son personajes desbloqueables que podremos controlar. Conforme nuestras habilidades mejoren y nuestro nivel aumente, nuevos retos se abrirán en el Mundo de Duelos. Qué personaje queremos potenciar o cuál se adapta mejor a la naturaleza de cada situación será decisión nuestra.
El modo historia es una buena forma de hacernos con el juego, pero el auténtico peso de Yu-Gi-Oh! Duel Links está en los Duelos online entre jugadores (PvP). En cualquier momento podemos buscar un desafío a nuestro nivel contra jugadores de todas partes del mundo. Existe una clasificación por la que tendremos que escalar si queremos que el universo de Duelistas de Yu-Gi-Oh! nos reconozca como Rey de los Duelos.
Con la experiencia y los recursos adquiridos, bien en el modo campaña bien en la tienda, será fundamental preparar nuestras propias barajas para enfrentarnos a nuestros rivales. Aquí reside el componente estratégico del juego y la clave de sus mecánicas.
El propio creador del manga, Takahashi, confesó que el juego de cartas fue una de las influencias más determinantes a la hora de hacer evolucionar la línea argumental de la historia y los personajes. Los lectores jugaban al juego de cartas, y adaptar esto a la serie fue algo que sucedió de forma natural. Hasta la aparición del juego, Takahashi no tenía intención de incluir las cartas en su serie.
Lo cierto es que la fórmula de los juegos de naipes funciona, y también sus actualizaciones (como bien ha demostrado HearthStone); estos juegos han mantenido su atractivo a lo largo de la historia y han pasado de ser una distracción para pícaros, así los refleja Miguel de Cervantes en su obra Rinconete y Cortadillo, a un fenómeno global.
La aparición de espacios virtuales donde encontrar siempre a un rival dispuesto a enfrentarse con nosotros y los algoritmos y sistemas de clasificación de los mismos, que organizan partidas contra rivales aleatorios en las que no existan excesivas diferencias de nivel, han acabado por disparar la fiebre por una forma de entretenimiento cuya tradición abarca siglos.
Takahashi tuvo que responder en numerosas ocasiones sobre si había sido una estrategia intencionada la de añadir componentes de los juegos de cartas creados sobre su Yu-Gi-Oh! al anime para captar más público para estos juegos. Su respuesta siempre fue la misma: “Añado materia de juego y gozo”. Sí reconoce ser el responsable del diseño de algunos de los juegos que se ven en la serie.
Su afición por estos juegos se sustenta sobre la importancia que concede a “espacios de comunicación entre la gente”. Resulta sorprendente, cuando no paradójico, que considere que no es posible una comunicación de calidad en internet.