Sindrome Metroidvania
¿Sabéis esos juegos que apenas tienen más resolución que un reloj digital y nos proponen un mapa descomunal comprendido en 2 simples dimensiones pero con mucha chicha para explorar y muchos puzles que resolver de esos que hacen que nos sintamos estúpidos por no haberlos sabido resolver antes?
Sí, ese rollo que en este mundillo se conoce como el síndrome “Metroidvania” y data de cuando la saga Castlevania dejó de ser lineal para basarse en el mapeado complejo y explorable de los Metroid. Ése, justamente ese síndrome maravilloso, fantástico, mágico, el cual llena de satisfacción cuando completamos un acertijo más y compensa con creces las 3 horas de frustración anteriores. Así, de esta forma, con esas características, con ese síndrome rebosando por los 4 costados –o los 2 planos, como prefiráis– es exactamente lo que sí es Celestial Mechanica.
Este título es una de esas joyas que te entretiene durante horas haciendo que te devanes los sesos en cada esquina de sus pixelados mapas y convierte su epopeya en la nuestra propia, al hacer que la lucha contra sus puzles –en apariencia complicados, pero muy simples cuando los resolvemos al fin– sea una batalla contra nosotros mismos por ver si estamos lo suficientemente despiertos y avispados.
O lo adoras o lo detestas, si no te gusta comerte la cabeza y prefieres la acción, amigo, esta no es tu aventura, da la vuelta y sigue rebuscando en las estanterías, seguramente encontrarás grandes títulos de acción pixelados también, pero no es este el juego que esperabas. Si por el contrario te encantan los acertijos pero no eres persona de acción, acompaña al primer individuo y rebusca en la zona que te interesa, porque esto tampoco es para ti. Celestial Mechanica como buen metroidvania que es, nos exigirá tanta dosis de sesos como de habilidad para las situaciones con más acción.
Historia
En un futuro lejano, cuando la tierra ya se ha ido de bruces contra sus propias eces y la humanidad toca a su fin, el planeta estalla en pedazos separándose de su núcleo, pero algo retiene la explosión y recompone a nuestra maltrecha bola azul. Unas deidades mecánicas son las misteriosas salvadoras que contienen y estabilizan la catástrofe.
Pasados los años las deidades mecánicas continúan protegiendo el planeta desde un castillo en las nubes, conocido por la humanidad como Mechanica. Nunca se habían dejado ver en la tierra, hasta ahora, cuando parece que el rey de ese castillo se ha vuelto un poco majara y como resultado comienza esta historia con la caída de nuestro robótico protagonista a la tierra.
Sabiendo lo mismo o menos incluso que nuestro personaje debemos comenzar a movernos por el mundo, donde comprobaremos que no somos al primer ser mecánico que el rey tarumba expulsa de Mechanica. Iremos conociendo a más compañeros lanzados de las alturas y obteniendo habilidades que nos permitirán avanzar en esta historia para averiguar que cable se le ha cruzado al susodicho rey mecánico.
Llegaremos a entablar conversación con algún curioso humano, no siendo otros que las versiones pixeladas de los propios desarrolladores del juego: Roger Hicks, el chico de la gorra –código y música– y Paul Veer, el rubito de gafas –Gráficos y animación–. En sus respectivas páginas veremos que no ponen poco mimo a sus proyectos por separado, y éste, para el que se han juntado, rebosa mimo y amor en cada pixel y cada beat de sus pegadizas melodías que sin necesitar un apartado técnico de impresión, nos meterá de lleno en su mundo.
Realmente no es un juego muy extenso, todo dependerá de nuestra habilidad y nuestro ingenio descubriendo que camino es el correcto en cada momento, aún así la experiencia será gratificante. El motivo de que este título sea gratuito no es otro que su publicación inminente en Steam, la plataforma de Valve, para cuyo lanzamiento sus creadores están preparando una nueva versión que dobla la duración.
No nos podemos quejar de que de esta manera nos permitan jugar al original por toda la cara, así que ya sabéis, está disponible para Windows y para Mac OsX al módico precio de unos clics de ratón. Cuando lo probéis, no perdais tiempo y venid a contarnos que os ha parecido y si en caso de que os haya gustado mucho os planteáis comprarlo en Steam. ¡A jugar que es gratis!
¡Bonus!
No creo que me canse desde hoy y hasta el 1 de marzo, cuando termina la promoción, de recordaros a todos vosotros que hay un juego muy bonito y muy barato, de los que nos gustan en esta sección que no debéis dejar de bajar. Se trata de Battlefield 1942 y ya sabéis que estáis invitados a agregarme al Origin para buscar un ratejo y echarnos unas partidas, equipados con sus añejas armas y montados en sus lentos pero controlables vehículos. ¡A las armas coño!
Tiene muy buena pinta! Gracias