La espera eterna
En la épica conferencia de Sony de 2006 en el E3, aparte de las numerosas risas que nos echamos a costa de la compañía, destacaba la demo de Gran Turismo Vision. Con coches y circuitos del Gran Turismo 4, el vídeo mostraba el siguiente mensaje: del realismo parcial al realismo total. Una declaración de intenciones que mostraba la ambición de Polyphony Digital, algo, que con sólo mirar ese video, sin duda se presentaba muy lejana. Y así fue, desde el lanzamiento de Gran Turismo 4 (a finales de 2004 en Japón) hasta el de Gran Turismo 5 pasaron 6 años.
Un periodo de tiempo en el que, seguramente, la madre de Yamauchi fue nombrada más de una vez por los ejecutivos de Sony. Y es que si había un momento en la historia de donde se necesitaba un Gran Turismo, era en los primeros años de vida de PlayStation 3, la cual no lo estaba haciendo muy bien y su posición privilegiada estaba comprometida. Para aliviar la situación se lanzó Gran Turismo HD, una demo gratuita que dejaba apreciar el primer pequeño (muy pequeño) bocado al próximo juego, y Gran Turismo 5 Prologue, esta vez sí de pago, que nos ofrecía un bocado más grande a tan magno proyecto.
De todas formas dicho juego fue lanzado 3 años antes de que finalmente Gran Turismo 5 saliese al mercado. Una muestra más de la explosiva combinación de ambición y el desarrollo tan complejo y costoso que exigían las nuevas consolas. Finalmente Gran Turismo 5 salió al mercado, mostrando en parte grandes avances hacia esa búsqueda incansable del simulador definitivo. Pero también con un gran coste en forma algunas notables carencias.
Tengooo karts, tengo F1, tengo Nascar, tengo turismos, …
En los más de 1.000 coches (o vehículos) que tiene Gran Turismo 5 es difícil no encontrar cualquier cosa con 4 ruedas. A los turismos y coches de carreras que habían formado gran parte de la plantilla desde siempre hay que sumarle coches de karts, de fórmula 1 (oficiales), Nascar, coches de Rally y más. Muchos de ellos nuevas incorporaciones a la saga. Hay pocos tipos de carreras de Gran Turismo 5 no recoja en su interior. Un auténtico paraíso para los amantes del motor de las cuatro ruedas.
No cabe duda de que las mejoras y añadidos a la saga son amplías. Modo online para 16 jugadores, carreras con paso de tiempo, condiciones climatológicas, los nuevos tipos de carreras ya mencionados, daños en los coches (no en todos), mejores en las físicas y comportamientos de los coches (como la posibilidad de que puedan volcar), más vehículos en pista eliminando la limitación a seis de los pasados juegos, un modo B-Spec mejorado, etc. ¡Incluso la I.A de los coches rivales ha mejorado bastante!. En definitiva todo un abanico de posibilidades para los jugadores que, posiblemente, se encuentren con el Gran Turismo más completo de la historia. Algo que se ha ido mejorando con las continuas actualizaciones que ha recibido el juego en forma de nuevos coches y circuitos.
Por desgracia hay algunas cosas que hacen que todo no sea tan bonito. El ejemplo más claro es el de los coches, porque aunque la cifra sea escandalosa tiene truco. El millar de coches está dividido entre Premium y Estándar, que no son más que unos eufemismos para “coche currado” y “coche cutre”. Y es que los vehículos Estándar están cogidos directamente de Gran Turismo 4 mientras que los Premium se han modelado con todo el lujo que la potencia de PlayStation 3 permite. La diferencia es evidente cuando se pone uno al lado del otro en un carrera con el correspondiente chirrido visual que provoca. También los Estándar carecen de detalles interiores, una novedad reservada para los coches Premium.
Todo esto provoca que conducir los coches Estándar sea mucho menos atractivo. Lo peor es que la mayor parte de vehículos los constituyen estos mismos, aunque los Premium por sí solos llegan a los más de 300 coches, un número nada desdeñable. De todas formas los gráficos son sensacionales con una iluminación tan realista que los juegos rivales sólo pueden soñar. Aunque de todas formas es evidente que en algunos momentos Polyphony Digital se ha visto limitada por la consola, algo que se deja ver en algunos efectos o en el menor detalle de muchos de los circuitos comparados con el de los coches.
El resultado final es un excelente juego, un enorme paso para la saga en muchos sentidos que, por otra parte, ha comprometido otros aspectos del juego. Esperemos que Polyphony Digital no vuelva a tardar 6 años en lanzar el juego, pero sin duda el juego da enormes esperanzas para la futura entrega para Orbis.
Así terminamos el recorrido por la saga de coches favorita de muchos y sólo nos queda repasar algunas curiosidades de esta. ¡Hasta la semana que viene!.
Grandes viciadas al 4, pero con este me lo pensé demasiado y al final me pude contener…
Si, una larguisima espera y al final, el mejor simulador automovilistico de todos los tiempos, con permiso de Forza 3.