Siempre que hago un artículo sobre un juego de móvil repito lo mismo, si me ha gustado lo suficiente como para escribir de él tiene que ser divertido, adictivo, sencillo y fácil de entender. Normalmente todos los juegos que me han gustado en esta plataforma tienen que cumplir en la mayoría de lo posible estos puntos.
WaveRun cumple todo esto a rajatabla todo lo anterior comentado, aunque si es verdad que quizá no sea el juego más innovador del siglo.
Nuestro objetivo en el juego será el típico, llegar hasta donde nos sea posible dependiendo de nuestros reflejos o práctica. El juego trata de dos líneas paralelas por las que va un punto, siempre que pulsemos la pantalla el punto cambiará a la otra línea sorteando así los obstáculos que nos harán perder la partida.
La mecánica es simple, pero bastante adictiva y rápida por lo que cuando nos superemos tendremos una buena sensación de satisfacción por progresión personal. Es una fórmula que a mí la verdad me gusta bastante.
El juego también cuenta con la posibilidad de jugar contra amigos, por lo que siempre será interesante el ver quien tiene los mayores reflejos de los dos y echarse unos buenos piques entre todos. Es un buen punto a favor, porque para que engañarnos, y entre tú y yo, nos encantan esos piques.
Así que ya sabéis, si queréis echar unas cuantas partidas al típico juego rápido, sencillo y adictivo ideal para esos viajes en autobús o metro, WaveRun es todo un acierto.
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