Ya hemos hablado unas cuantas veces de los addons de World of Warcraft y de cómo pueden seros muy útiles a la hora de avanzar en vuestras aventuras en el fantástico mundo que Blizzard creó hace casi 11 años. Durante el transcurso de ese tiempo la comunidad de modders ha ido evolucionando junto al juego, personalizando casi todos los aspectos del mismo y añadiendo posibilidades realmente interesantes.
Prueba de ello es el sistema de coordenadas que permite orientarse de formas inimaginables y con una precisión impresionante, cosa que sería imposible sin hacer uso de addons. Blizzard sabe que muchos jugadores quieren modificar la interfaz a su gusto, y por ello no prohíben su uso, es más, apoyan la creación de estas modificaciones. Por ello, vamos a ver cómo podemos instalarlos.
Instalación de addons en World of Warcraft
Buscando por Internet se pueden encontrar gran cantidad de addons, aunque lo primero que hay que hacer antes de lanzarse a descargar cualquiera que veamos, es asegurarse de que es compatible con la versión actual de nuestro juego. En el momento de escribir este artículo, la versión vigente es la 6.2.0. correspondiente a Warlords of Draenor, y lo ideal es siempre buscar uno compatible y mantenerlo al día, aunque pueden instalarse versiones anteriores si sus creadores todavía no lo han actualizado.
Una de las muchas webs donde encontraremos addons es la de Curse, en su sección Wold of Warcraft addons, gracias a la cual podremos ver fácilmente la última fecha de actualización de cada uno de estos complementos, así como la versión con la que es compatible y otros datos de interés, todo desde su ficha de información. Cuando existen varias alternativas y no tenemos una preferencia entre ninguna de ellas, lo mejor es fijarse siempre en el número de descargas, pero sobretodo en si se ha actualizado hace poco y qué versión soporta, porque podríamos estar descargando un proyecto abandonado.
Esta página web nos da la opción de descargarlo directamente, o utilizar el Curse Client del cual hablaré más adelante. Si escogemos la primera opción, descargaremos un archivo comprimido que podremos extraer con cualquier programa como WinRAR, y dentro encontraremos una serie de carpetas con distintos nombres, aunque todos compartirán el nombre del addon. Para instalarlo, solo habrá que localizar la carpeta del juego, y copiar todas esas carpetas dentro de Interface/AddOns, que generalmente estará ubicado en esta ruta:
C:/World of Warcraft/Interface/AddOns
A la hora de actualizar un addon, habrá que hacer exactamente lo mismo con la nueva versión ya descargada y comprimida, y cuando nuestro sistema operativo nos pregunte si queremos reemplazar todos los archivos escoger que si. Sin embargo, esta es la forma manual de instalarlos, y gracias a la web de Curse existe un cliente que automatiza el proceso, aunque solo funciona en su web.
Curse Client automatiza el proceso
Gracias a este programa, que no afecta al rendimiento del juego ya que hace un consumo de CPU y RAM realmente bajo, instalar y mantener los complementos de World of Warcraft, y de cualquier otro juego de los que soportan, se convertirá en una tarea realmente sencilla. Pero lo mejor de todo es que con instalar este pequeño programa tendremos nuestros addons disponibles y con nuestras preferencias siempre guardadas en la nube, por lo que solo hará falta instalarlo en cualquier otro equipo e iniciar sesión con nuestra cuenta para que el juego quede exactamente igual que en nuestro equipo habitual.
El propio cliente nos avisará cuando exista alguna versión actualizada de nuestros addons, y descargarlos y actualizarlos será tan fácil como hacer clic en “UPDATE”. El programa se encargará de todo y nosotros solo tendremos que preocuparnos por jugar, aunque sin una suscripción de Curse Premium solo podremos tener 2 descargas activas al mismo tiempo, lo cual realmente no afecta para nada al uso de dicho programa, y tampoco tendremos acceso a la sincronización entre equipos mediante nuestra cuenta.
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