Temple run 2 recibe una nueva actualización llena de contenido. La update, llamada “Frozen Shadows” (sombras congeladas), como su nombre indica, viene con motivos invernales y entre otras cosas, nos permite jugar en unos paisajes gélidos que se ven bastante bien. Te contamos más a continuación.
Si hay nieve, hay yetis
Pese a las novedades, el juego se mueve bajo la premisa de siempre; tenemos que escapar del templo evitando todos los obstáculos, que van desde grandes precipicios, a vagonetas, pasando por puentes y trampas de pinchos, además, todo esto escapando de los yetis, que han reemplazado a los monos furiosos en esta actualización. Todo esto simplemente deslizando nuestros dedos sobre la pantalla para llevar a cabo las distintas acciones de una manera muy intuitiva.
Aunque este título, sea antiguo, y lleve en nuestros móviles mucho tiempo, se ve increíblemente bien. Los paisajes nevados y las grutas de hielo nos sacarán la vena de explorador que llevamos dentro, y, hablando de exploradores, se han añadido nuevos personajes y trajes a desbloquear mediante tesoros o micropagos (lo de siempre) además de nuevos power-ups para facilitarnos la huida.
Incluso, hay una nueva zona en la que tendremos que deslizarnos por un tobogán de hielo montados sobre los restos de lo que parece el cráneo de un animal prehistórico, esquivando las caídas a toda velocidad. Como las secciones de vagoneta, pero con una vuelta de tuerca, que, pese a ser bastante parecido, basta para variar los obstáculos.
Se nos sigue dando la posibilidad de jugar en el mapa original, aunque en vista de las inclusiones de este, no hay un motivo real para hacerlo más que el simple hecho de cambiar la ambientación a las ruinas de la jungla clásicas.
En resumen, una buena excusa para volver a jugar este archiconocido juego móvil, que pese a sus vistosos gráficos, funciona con fluidez hasta en una tostadora. No dudes en probar Frozen Shadows.