No hay nada más satisfactorio que superar un buen reto en un videojuego, independientemente de la dificultad que conlleve no hay nada mejor que poder colgarnos la medallita de habernos pasado un juego en su mayor dificultad, sobretodo si se trata de un juego como el último Doom que más que difícil es imposible. Obviamente no hablamos del modo ultra pesadilla, en el que al morir perdemos todo el progreso y tenemos que volver a empezar desde el principio, sino que, nos referimos al modo pesadilla, que ofrece el mayor reto manteniendo el sistema de guardado tradicional, no es moco de pavo. A continuación te damos algunos consejos para que puedas acabar con todos los demonios y terminar esta infernal aventura.
Rip and tear
Pese a que este último y renovado título de la saga mantiene el espíritu arcade y simple de los originales, tiene algún que otro giro de tuerca que dota de cierta profundidad al gameplay, algo que convierte al juego en algo más que un matamata sin dejar de ser… bueno, un matamata.
Lo más importante a la hora de avanzar es gestionar bien la vida, el escudo y la munición. Por el escenario encontraremos los típicos ítems de curación, balas, etc, pero, lo que debemos hacer para mantener la vida alta es saber cuando efectuar las ejecuciones, puesto que, aparte de ser increíblemente viscerales y espectaculares nos ayudan, puesto que los enemigos sueltan objetos al morir de esta forma.
Hay que saber cuando ejecutar y dejar enemigos debilitados para poder acabar con ellos a melee mas tarde. Os pongo un ejemplo; imaginad que estamos luchando contra un enemigo muy duro con un montón de acólitos alrededor, lo mejor que podemos hacer es disparar a los pequeñajos para dejarles casi sin salud y centrarnos en el monstruo grande, de esta forma podemos ejecutar fácilmente para recuperar vida en momentos peliagudo en los que nos quede poca vida o solo podamos usar la pistola.
Con estos tips no deberíais tener problemas para superar el modo pesadilla, quien sabe, igual después os atrevéis con ultra pesadilla.
