Ya avanzamos la semana pasada la intención de Microsoft de asistir con su artillería Xbox One al Tokyo Game Show de este año. Y destacaba la dificultad de penetración de Microsoft en el mercado japonés. Yasuyuki Higuchi, máximo dirigente de Microsoft en tierras niponas, ha declarado que es difícil que Xbox One triunfe si ésta no se adapta al gusto de los japoneses.
Destaca también las escasas ventas de Xbox 360, donde sólo se venden unos “pocos cientos de consolas cada semana” (un ritmo de venta escaso para Japón).
Por supuesto, y para intentar recuperar mercado comenta que están pensando en diseñar una política de contenidos que atraiga al público oriental. Una de esas medidas podría estar en las capacidades multimedia de la máquina de Microsoft, ofreciendo servicios de música y vídeo bajo demanda que atraigan lo suficiente como para justificar su adquisición. Aunque no olvidemos que una consola tiene un propósito principal: jugar.
Y en este sentido Yasuyuki Higuchi es muy sincero.
Lanzar la consola tal y como es sería difícil.
Tal vez la decisión de llevar el lanzamiento de Xbox One a 2014 en Japón corresponda a una estrategia orientada a ganar tiempo y diseñar la mejor forma de triunfo. Pero opino personalmente que Xbox One no ganará la batalla en Japón, ojalá eso sí, que triunfe lo suficiente como para ver un aumento de ventas en el país del Sol Naciente.
La competencia se lo pondrá tremendamente complicado, pero es evidente que Yasuyuki Higuchi no puede quedarse con los brazos cruzados ante un mercado que está ya previamente dominado por Sony y Nintendo.
La respuesta sólo la tendremos después del lanzamiento, todavía es pronto para intentar adivinar el futuro, aunque el lanzamiento de PS4 meses antes que el de la máquina de Microsoft pone en jaque a Xbox One.
¿Vosotros qué opináis? ¿Conseguirá Yasuyuki Higuchi cambiar la política de Microsoft para hacer su máquina atractiva a los japoneses?
