Cuando llegas a The Elder Scrolls Online te sentirás un poco descolocado y más lo estarás en caso de que seas de habla Hispana y no entiendas muy bien el idioma del juego. Si has jugado a Skyrim puede que te suenen muchas cosas pero la estrategia ha cambiado, creo que TESO es diferente y deberemos de acostumbrarnos a ello. Aún así, eso de tener que pagar 13 euros para no tener el juego en Español me parece una salvajada.
Además de las razas y las alianzas, de las que hablaremos más adelante si os interesan, en The Elder Scrolls Online los jugadores podrán escoger una clase determinada. Al igual que las clases de South Park: La Vara de la Verdad, son bastante flexibles y se pueden ir moldeando a nuestro gusto a medida que juguemos, todas las armas y armaduras estarán disponibles sin importar este atributo aunque estaría bien que conocieras sus habilidades especiales.
Dragonknight
Es una clase muy versátil y se puede jugar de cualquier forma con ellos. Te servirá perfectamente para el ataque cuerpo a cuerpo y, además, será capaz de ofrecerte habilidades mágicas muy buenas y más cuando se trata de fuego. Si quieres construir un personaje resistente este es el ideal, aguanta un montón de daño y es capaz de atacar a cortas y a largas.
Las habilidades del Dragonknight
- Ardent Flame – Te permitirá dañar al enemigo con el fuego.
- Draconic Power – Esta faceta te servirá para ganar puntos de defensa, cura, etc. Perfecta para blindarte ante los enemigos.
- Earthen Heart – A la par de defensiva, permite ofrecer soporte al grupo con ella, es muy útil.
Nightblade
Sería algo similar a la clase ladrón, esta orientada a los gamers que prefieren eliminaciones rápidas de enemigos solitarios, desde las sombras, siendo la clase ideal para toda esa gente que prefiere esconderse y hacer las cosas bien. Como un buen ladrón, la daga será su mejor arma y llevará una armadura media. Lo bueno de escoger esta clase es su capacidad de conseguir un golpe crítico, mucho mayor que en las demás y con más porcentaje de acierto.
Las habilidades del Nightblade
- Assassination – Esta habilidad está orientada para los ataques del tipo melee y más si usas armas dobles. Te permitirá aumentar la velocidad de ataque e incluso el tele-transporte hacia tu objetivo con daños a la vez que lo haces.
- Shadow – La sombra, te permitirá meter miedo, controlar masas e incluso volverte invisible.
- Siphoning – Mientras quitas lo mejor de tus enemigos, a ellos les causarás efectos negativos y tú te beneficiarás.
Sorcerer
Lo mismo que la clase mago, es la que domina las capacidades mágicas con soltura. Utilizará los báculos para lanzar magias y protegerse bajo armaduras ligeras. Si juegas con ella deberás centrarte en dañar al enemigo y lanzar maldiciones. En el caso de que vayas en grupo también puedes apoyarlo y curar al equipo.
Las habilidades del Sorcerer
- Dark Magic – Además de servir como soporte al equipo, te permitirá controlar el entorno y potenciar tus habilidades mágicas.
- Daedric Summoning – Invocarás a algunos esbirros que lucharán a tu lado.
- Storm Calling – Aumentará la capacidad para hacer daño con tu magia.
Templar
El paladín, la típica clase que se centra en hacer daño cuerpo a cuerpo e incluso con alguna habilidad mágica de por medio que le permite curarse y protegerse, siempre tiene algo de salud extra.
Las habilidades del Templar
- Aedric Spear – Te permitirá proporcionará daño físico y mágico con magia sagrada.
- Dawn’s Wrath – Es la habilidad que más soporte ofrece y permite el control de masas, también sirve para hacer daño mágico.
- Restoring Light – Con esta faceta podrás curar a tu grupo y ofrecer algo de soporte mágico.
¿Qué te han parecido las clases de The Elder Scrolls Online? En un primer momento nos recordarán, sobre todo, a las típicas clases de los juegos de rol pero vemos como son cada vez más personalizables y ya no se limitan a una cantidad de armas, podrás llevar equipada cualquier cosa aunque las propias de la clase siempre le van a funcionar mejor. Yo he escogido la primera por ser la más versatil, ¿y tú?. Ten cuidado cuál eliges porque la muerte tiene un precio.