Dicen que no hay más ciego que quien no quiere ver, y eso es precisamente lo que le está pasando a Nintendo con Wii U. A pesar de haber comenzando con buen pie con unas ventas decentes durante la pasada campaña navideña, con el paso de los meses éstas se han ido desinflando. Muchas han sido las voces que han pedido una rebaja de precio para la sobremesa de Nintendo, desde analistas al público general. Algo a lo que desde la cúpula de Nintendo se ha respondido con una sistemática respuesta negativa, por unas razones o por otras.
La última de las razones esgrimidas por Satoru Iwata durante una entrevista con CVG es que si el precio de Wii U fuera un auténtico problema, el modelo básico sería el más vendido. Iwata además agregó:
El verdadero problema es la falta de software, y la única solución es lanzar al mercado un buen número de títulos de calidad.
Si bien es cierto que el bueno de Iwata puede que tenga algo de razón en lo que al pobre catálogo actual de Wii U respecta –a pesar de que las incorporaciones de Pikmin 3, New Super Luigi U o el próximo The Wonderful 101 suponen una inyección de calidad al mismo–, en la ecuación del estado comatoso de Wii U no se puede omitir el factor precio, sobre todo cuando las futuras Xbox One y PS4 prometen ofrecer un hardware bastante más puntero por 50 euros más si comparamos PS4 con la versión Premium de Wii U.
Posiblemente al señor Iwata no se le ha ocurrido pensar que tal vez la gente no se decanta por el modelo básico de Wii U porque 8 Gb de memoria interna que se quedan en unos 5 si descontamos el espacio necesario para el OS de la consola se antojan claramente insuficientes con los tiempos que corren, además de resultar contradictorio con la política de mimar a los desarrolladores indie y su eShop. A esto además debemos unir el lastre que supone la falta de ciertos accesorios que sí vienen con el modelo Premium, como la base de carga para el Wii U GamePad.
Está claro que, de cara al consumidor, una rebaja les permitiría comerse una buena parte del pastel de ventas durante las próximas navidades. Y viendo el precedente de Nintendo 3DS, que tras la rebaja resurgió de las cenizas cual ave fénix, es curioso que la rebaja esté tardando tanto y se muestren tan reticentes a hacerla.
De cualquier modo más les vale ponerse las pilas tras haber vendido la irrisoria cifra de 160.000 consolas a nivel mundial entre Abril y Agosto.
Y vosotros, ¿creéis que Nintendo debería hacer una rebaja como hizo con Nintendo 3DS para tomar algo de ventaja frente a Xbox One y PS4?