En la saga Dark Souls, los enemigos son uno de los protagonistas del juego, ya que en sus manos sufriremos algunas de las muertes más dolorosas de estos títulos. En Bloodborne, la secuela espiritual de Demon Souls, este protagonismo se mantiene donde no sólo se mantiene el carácter mortífero de los enemigos, sino que ahora presentan un aspecto mucho más detallado, gracias al poder de PlayStation 4, y un diseño aún más oscuro y terrorífico.
Sin duda Bloodborne cada día pinta mejor, y esta vez parece más que claro que no estamos ante una decepción cómo lo ha sido The Order: 1886. Cada nuevo vídeo deja más claro que estamos ante un nuevo Dark Souls excepto en el nombre, y lo mejor es que estamos ante la evolución gráfica que la serie Souls estaba pidiendo a gritos.
No sólo los escenarios han sufrido un gran cambio, con un nivel de detalle impresionante, ahora los enemigos están mucho más cercanos a sus diseños en papel. En el video podemos ver unos cuantos de los muchos enemigos que veremos en el juego y que harán que veamos la pantalla de “Game Over” muchas veces. Algunos recuerdan a pasados enemigos (cómo las ratas o el gigante con vendas) y otros totalmente nuevos.
Cómo se puede ver, no sólo debemos temer a los poderosos minijefes que aparecen a lo largo del juego y que tienen un tremendo poder de ataque, sino a los enemigos más débiles, que en grupo pueden resultar mortíferos. Al final del vídeo podemos observar cómo de absolutamente imponentes pueden llegar a ser, pero cómo siempre, con habilidad podremos superar cualquier obstáculo.
A destacar que el vídeo ofrece un vistazo a una nueva arma, un bastón extensible que se puede usar cómo látigo, nada cómo cazar monstruos con un indudable y característico estilo burgués de la Inglaterra victoriana. Cada nuevo vídeo hace que la espera de la que parece la exclusiva del año se haga más difícil, ya queda unas pocas semanas.