Corifeus es uno de esos malos de película al que el héroe inexperto encara en los primeros compases de una larga historia, y aunque no se le ve mucho la cara, su amenaza y su presencia desde la sombra son constantes. El mundo depende de nosotros y Corifeus no nos lo pondrá fácil en la última misión, de la que ayer ya os hablamos un poco.
Como ya sabéis, alerta spoilers. Una vez que empecemos la misión no habrá vuelta atrás en algunos aspectos: las misiones del círculo interno estarán inaccesibles, con lo que si tenemos algún romance pendiente o queremos terminar las historias personales de algún compañero, lo tenemos que hacer antes de ir a por Corifeus. El resto de secundarias y coleccionables seguirán esperándonos.
Cuando encaremos a Corifeus debemos tener en cuenta que suele usar hechizos con área de efecto, así que estaría bien separar a los miembros de nuestro grupo para repartir el daño. Es inmune a los incapacitantes y tiene un poderoso rayo de energía del que deberíamos ponernos a cubierto –hay numerosos parapetos para ello–.
Durante el combate irá reculando conforme le quitemos vida, y tendremos que ir a por él. De camino tenemos cajas de suministros que nos vendrán de perlas. Aunque es una verdadera pena que ocurra esto, la sensación con el final boss es la de que se le gana con paciencia porque Bioware nos echa un cable con suministros. Y esa sensación es muy negativa, más que un reto parece un trámite.
Cuando le quitemos la mitad de vida vendrá su dragón, al que ya os contamos ayer cómo vencer, y una vez su mascota esté lista de papeles, iremos de nuevo a por Corifeus, previo repostaje en cajón de suministros.
Ahora luchará de forma un poco más complicada, teletransportándose mucho, lo que siempre es un fastidio. Además tiene un ataque en el que se queda unos segundos quieto y emite una explosión. En esta zona hay unas columnas con las que cubrirnos, cuando veamos a Corifeus sin hacer nada, es momento de parapetarnos.
Lo único bueno es que sólo le quedará la mitad de vida. Hay que ser muy veloz, tener habilidades con las que nos desplacemos rápido preparadas y no desaprovechar ninguna oportunidad. Poco más que añadir, suerte y a ello.
Antes, eso sí, de enfrentarnos a él, lo mejor será aprovechar todas las secundarias posibles para subir de nivel, haber matado a los dragones y tener un romance si queremos un final algo subido de tono.
¿Conoces alguna estrategia que te haya funcionado bien con Corifeus? ¡Compártela con nosotros!