Todo lo que un buen gamer debería saber a la hora de comprar un ratón para jugar

Soy un amante de las consolas y, sobre todo, de la nueva generación pero eso no significa que no haya tenido mis más y mis menos en PC. Estos últimos años he conseguido adaptarme al gamepad a la perfección y cuando me las tengo que ver con un ratón echo de menos los sticks analógicos de mi DualShock 4.

Uno de los mayores inconvenientes de jugar en PC es que he perdido la práctica con el mouse pero, si uso mi ratón preferido, ya no me siento tan indefenso ante esos enemigos inesperados. Es vital tener un buen ratón para jugar y hoy me gustaría aclararte todo lo qué deberías saber para cambiar tu ratón o, si no lo tienes, elegir uno nuevo. Hay muchos más factores a tener en cuenta cuando compramos un nuevo ratón que los DPI o el precio, me gustaría que lo supieras todo sobre ello.

La ergonomía

Lo más importante de un ratón es su ergonomía. Si no sientes el ratón cómodo en la mano nunca vas a ser feliz con él ni podrás sacarle el máximo partido. Hay un factor tamaño (de la mano) que influye mucho pero también está presente el agarre que puede ser tipo palma (con la mano completa), tipo garra (como puedes ver en la imagen de abajo) o híbrido. Para elegir el que nos conviene hay que hablar de 3 factores como son la forma, el tamaño y el peso.

Forma

Para escoger una buena forma lo ideal es que puedas probarlo pero, si no puedes, escoge los ergonómicos. Un diseño raro no tiene nada que ver con un agarre incómodo aunque dependerá mucho de este. Si tu forma de usar el ratón es tipo palma lo ideal es que sea ergonómico y grande.

Tamaño

Existen 3 tamaños (grande, estándar o pequeño). De los últimos ya casi no queda ninguno en el mercado y estándar es recomendable para el agarre tipo garra, son algo más pequeños aunque, si tienes una mano pequeña, no necesitarás uno grande para agarrar con la palma, te podría llegar con un estándar.

Peso

Mucha gente no tiene en cuenta el peso de su ratón y es muy importante. Si usas una sensibilidad baja y estás constantemente levantando el ratón coge algo ligero, tus dedos y tu brazo te lo agradecerán.

Mucha gente escoge uno pesado por la sensación de calidad y resistencia pero mi opinión personal es que escojas algo liviano y sólido. Ahora bien, la mayoría de las gamas altas (e incluso las bajas-medias) incorporan pesos intercambiables. A no ser que seas un verdadero gamer de pura cepa y estés cambiándolos constantemente podrían no servirte de nada, quizás sea un lujo innecesario.

Aspectos técnicos

Es por lo general lo que solemos mirar cuando vamos a comprar un ratón y, aunque es muy importante, no deberías descuidar los parámetros anteriores.

Tipo de sensor

Por lo general a día de hoy se utilizan los sensores láser pero hay 3 tipos y las diferencias son mínimas entre ellos. Aunque también están los de bola si queremos añadir un cuarto (y se hizo el silencio…).

• Láser – Pueden capturar movimientos en casi cualquier superficie, son los más polivalentes.
• Óptico – En superficies con reflejo o brillantes suelen tener problemas para leer tus desplazamientos e incluso en algunas alfombrillas pueden no funcionar bien.
• Infrarrojos – Funciona de forma similar a los ópticos aunque diría que un poco peor.

Además de esto, la distancia a la que dejan de leer cuando lo levantamos es importante (lift off distance). Menos de 5 mm está bien, si la distancia es más pueden pasar cosas raras cuando lo levantamos y reubicamos pero la mayoría de los fabricantes no nos proporcionan este dato.

Puntos por pulgada o DPI

Esta medida es lo que le permite al ratón discriminar entre dos puntos y se usa, normalmente, para describir la sensibilidad de un ratón. Una pequeña cámara que lee la superficie por donde pasa.

Si un ratón óptico tiene 2000 DPI y un ratón láser tiene 2000 DPI son igual de precisos (aunque según la calidad del mismo puede variar un poco y ahí es donde entra la tasa de refresco). El láser puede alcanzar mayor precisión que un óptico pero, a mismos DPI, la sensibilidad es la misma.

Tasa de refresco

Los DPI son importantes pero hay una cantidad de imágenes por segundo que la cámara del ratón consigue tomar. Si tu ratón toma pocas imágenes por segundo, por mucha sensibilidad que tenga, no podrás disfrutarlo correctamente. Una tasa de refresco de más de 500 Hz no se suele aprovechar en la realidad por lo que no deberías coger un ratón más potente que esto si no lo necesitas.

Entonces… ¿qué debes hacer? Dependerá mucho del uso, en general un juego del tipo FPS necesita un ratón rápido pero, si juegas con una sensibilidad baja, de poco te va a servir. Tienes que determinar el uso que vas a darle. Y ahora llegó el truco, a mayor resolución de pantalla más cantidad de DPI necesitarás para tener más rapidez, no es lo mismo jugar en 1080 que a 720, tu ratón necesitará más puntos para llegar al mismo sitio y eso es algo que, aunque muchos saben, no se tiene en cuenta. Para jugar en 1080p una sensibilidad de 5700 DPI es una bestialidad, si nos pasamos al 4K ya estamos hablando de algo razonable.

Más DPI y más tasa de refresco no te harán ser mejor jugador, pueden ayudar en casos extremos pero no son, para nada, un gran determinante a la hora de determinar la habilidad de un jugador novato. Sería interesante que los DPI del ratón se pudieran ajustar directamente en el ratón porque, cuando viene tu padre, podría no controlarlo y por medio de un simple botón reduce la sensibilidad en cuestión de milésimas de segundo. No sirve de nada que subas la sensibilidad por software en un juego, esto los hace bastante malos porque se saltarán píxeles.

Aceleración

La aceleración de un ratón gamer debería ser 1:1 y debería estar desactiva, el problema es que algunos juegos o incluso el propio Windows la activan por defecto. Hay aplicaciones por Internet que sirven para eliminar todos estos inconvenientes que nos dificultan un montón las cosas a la hora de jugar.

Algunos detalles a tener en cuenta

A continuación me gustaría comentar algunos puntos que, aun estando sueltos, son tan importantes como los anteriores. También deberíamos fijarnos en todas estas cosas a la hora de comprar un nuevo mouse.

• Precio – El precio no es un determinante a la hora de comprar un buen ratón. Está claro que nunca un ratón de 20 euros va a ser mejor que uno de 100 pero ese ratón de 20 o 30 euros podría darte lo mismo que vas a aprovechar del que cuesta 3 veces más. Eso deberás aclararlo tú mismo.

• Ratones para zurdos – No quiero marginar a la gente que sea zurda (no tiene nada malo pero, aunque los diseños han cambiado bastante, todavía hay empresas que siguen fabricando solo para diestros). Si eres zurdo lo mejor es que te compres un ratón neutral, con un diseño idéntico de ambos lados y nunca un ratón para diestros, podría no ser muy cómodo.

• Botones extra – Si te gustan mucho los MMO o juegos para los que necesitas muchos botones sería interesante que tu ratón tuviera algunos botones extra configurables a tu gusto. Son de gran utilidad. A mí ya solo poner el botón del walkie-talkie de Arma 3 en un botón del ratón me hace mucho más cómodas las cosas.

• Alfombrilla – Son un mundo a parte y de nada servirá un buen ratón que funcione en una mala superficie. La QCK que es la misma que sale arriba y quizás sea uno de los mayores éxitos y yo, personalmente, la seguiría recomendando por su buen calidad y precio.

• Las mejores marcas – Existe mucha competencia pero, sin arriesgarme mucho, me gustaría mencionar a las de más nombre y que mejores ratones están fabricando en este momento. Mad Catz, Logitech, Steel Series, Razer y algunas más fabrican cosas de gran calidad pero es interesante comparar precios y ofertas.

Estoy seguro de que se te ha hecho largo pero, después de haber leído este tostón, estás preparado para comprar un nuevo ratón para jugar. Ya lo sabes todo y sí tienes alguna duda solo debes utilizar los comentarios para que te la aclaremos con la mayor brevedad posible. Recuerda que, después de haber comprado un buen PC gamer o que te agencies una Steam Machine, ha llegado el turno de gratificar a nuestra mano con un buen ratón.