Activision se ha mantenido fiel a su egoísmo lanzando una entrega anual de Call of Duty durante la última década haciendo caso omiso a distintos inversores y también a analistas que presagiaban el declive de la franquicia al alcanzar el punto de fatiga característico del sector del videojuego. Los primeros avisos llegaron el año pasado con la salida de Call of Duty: Ghosts, una entrega de la serie que ya no contó con récord de reservas y que se reflejó en unas ventas que se quedaron por debajo de anteriores iteraciones de la famosa serie bélica.
Lejos de optar por una estrategia de mercado similar a la vista con Electronic Arts y su Battlefield, los norteamericanos de Activision incluyeron a un tercer equipo de desarrollo dentro de la ecuación para relevarse en el desarrollo de nuevas entregas al pasar a la nueva generación de consolas, ya que precisaban de una mayor carga de trabajo respecto a lo que estaban acostumbrados.
El mercado está empezando a dictar sentencia sobre la serie Call of Duty en un informe publicado por la firma de analistas Cowen & Company en la que, basándose en los datos de reservas realizados en Amazon, arrojan una desesperanzadora cifra de reservas para Call of Duty: Advanced Warfare, la nueva entrega de la serie que está a unos días de desembocar en el mercado.
Según lo recogido en dicho informe, las reservas de Call of Duty; Advanced Warfare están un 40% por debajo de las vistas con Call of Duty: Ghosts y hasta un 70% menos respecto a Call of Duty: Black Ops II. La explicación dada por la firma de analistas es que la serie ya ha alcanzado su pico máximo de ventas, y que como es habitual en la mayoría de los productos anuales, se experimentará un decremento de reservas (y consiguientes ventas) en próximos años, hasta que la serie regrese a otro punto álgido.
En todo caso un menor número de reservas ni significa necesariamente que el juego vaya a ser un fracaso, pero sí que no ostenta el mismo grado de popularidad que tenía la serie hace 3-4 años. Esto quizás sirva como una llamada de atención hacia la editora para que entienda que el público necesita de nueva propuestas jugables como Destiny y Watch Dogs para seguir enganchados en el mercado.
