Mejores Sagas Tomb Raider

Hoy es la última entrega de nuestro repaso de Tomb Raider, y como siempre tocan curiosidades, aunque como veréis estas se centran en el personaje de Lara Croft, autentica protagonista de la saga y que acaparó casi toda la fama de esta misma. Esto también nos ayudará a recordar lo famosa que llegó a ser el personaje, traspasando la barrera de los videojuegos. No cabe duda de que Lara fue uno de los personajes de videojuegos más conocidos de la historia.

Hoy toca hablar de los dos últimos juegos antes del nuevo cambio que promete cambiar a Lara Croft y a la saga de forma más que significativa, Tomb Raider: Underworld y Lara Croft and the Guardian of Light. Mientras Underworld completa la trilogía empezada con Tomb Raider: Legend mientras sigue la estela de los dos anteriores juegos, Lara Croft and the Guardian of Light es un spin-off muy novedoso en cuanto al concepto dentro de la saga ofreciendo un jugabilidad muy distinta mientras mantiene algunos de sus rasgos.

Tomb Raider: Legend fue el primer paso para traer nueva sangre a Lara Croft y a la saga. Crystal Dynamics comenzó un nuevo estilo de juego más moderno y actual, sin embargo el siguiente título era un remake del primer Tomb Raider llamado Tomb Raider: Anniversary, un juego que mezclaba con mucho oficio las dos distintas etapas de la saga mientras modernizaba un juego que claramente se había quedado antiguo. Sin duda alguna uno de los mejores juegos de la saga.

Después del batacazo de Angel of Darkness, la propietaria de la saga Eidos, decidió que Core Design, que fueron los creadores de los primeros seis juegos, no hicieran el siguiente episodio de las aventuras de Lara Croft. Los elegidos fueron Crystal Dynamics, un estudio que había creado juegos como Soul Reaver o la saga de plataformas Gex. El objetivo era revitalizar la saga para que volviera a ser la superventas de siempre y en parte lo consiguió, pero no cabe duda de que el daño ya estaba hecho.

Después del éxito de la primera película el personaje de Lara Croft se encontraba en lo más alto, pero también la saga debía afrontar nuevos retos. El salto de generación a PlayStation 2 se esperaba con ansías después de cinco entregas de calidad, pero que sin duda apremiaban a un cambio de sangre e introducción de ideas nuevas. El resultado no pudo ser peor, un juego que tras numerosos retrasos, sólo pudo ofrecer un producto mediocre que daño de forma permanente la saga.

Esta semana dejamos la época dorada de la saga en la mítica PlayStation de Sony. Y es que después de tres juegos cada año desde 1996 los chicos de Core Design no querían faltar a su cita anual en 1999 y 2000, nuevo año, nuevo juego de Lara Croft. La saga era una máquina de hacer dinero y con una película en camino estaba en pleno auge. Pero sin duda esta última etapa en la consola de 32 bits de Sony demostró que la fórmula se estaba haciendo muy antigua.

Igual que con Tomba Raider II, la tercera entrega de la saga no se hizo esperar y un año después, en 1998 el juego fue lanzado para PlayStation y PC mientras su protagonista, Lara Croft se iba haciendo aún más famosa. Lara ya era todo un icono de los videojuegos, y no sólo de estos, ya que el personaje se iba expandiendo fuera de estos. El juego, en cambio, no expandía sus horizontes y seguía con la mismas bases de los anteriores juegos.

La semana pasada empezamos a descubrir y explorar los orígenes de Tomb Raider y a su protagonista, Lara Croft, uno de los personajes más reconocibles de los videojuegos. Después del original Tomb Raider, Lara Croft se convirtió en una de las caras (y cuerpos) más reconocibles de la generación de los 32 bits y una secuela llegó apenas un año después dispuesta a continuar el éxito y la calidad de la primera entrega. Tomb Raider II se convirtió así en uno de los mejores juegos de la saga.

En plena era de las consolas de 32 bits, el mundo de los videojuegos estaba en plena expansión lo que daba la posibilidad de que nacieran nuevos personajes que los jugadores de todo el mundo admiraran. Entre todos estos nuevos personajes se puede destacar, fácilmente, a Lara Croft. Un héroe femenino dominado en un mundo de hombres era un golpe de aire fresco y junto con un juego tan innovador como Tomb Raider el éxito estaba asegurado.